Un intérprete es aquel profesional que transmite un determinado mensaje de una lengua a otra, manteniendo siempre el registro original del orador: se trata de una retransmisión directa en otro idioma, y no basta con una preparación académica para poder sacar adelante este tipo de proyectos. Para obtener un servicio de interpretación de calidad, el profesional debe someterse a un proceso previo al evento en el que prestará servicio en el que se hará con las herramientas necesarias para poder afrontar el trabajo con eficacia.
Si bien existen ciertas cualidades que son deseables en un intérprete y de las que ya hemos hablado en otra ocasión en el blog, para encarar adecuadamente un proyecto de interpretación no basta con poseer dichas aptitudes: un servicio de calidad requiere de preparación y de seguir determinadas fases de gestión de proyecto para que todo salga tal como se espera y para que el cliente quede satisfecho.
Fases en la gestión de un servicio de interpretación de calidad
Un servicio de interpretación de calidad comienza a gestarse mucho antes de que se realice la traducción del mensaje del orador: existen distintas fases de gestión de proyecto y de preparación que el profesional debe seguir para brindarle al cliente exactamente lo que necesita y desea recibir.
Entablado el contacto entre el profesional y el cliente que requiere los servicios, el intérprete solicitará documentación de referencia para realizar una exhaustiva investigación y prepararse por adelantado al momento de la interpretación en cuestión. Cuanto más se haya estudiado y ahondado en el tema, mejor será el resultado final y más capacitado estará el profesional para poder llevar adelante su labor.
La importancia de la preparación del intérprete
Prepararse adecuadamente para una interpretación ya sea simultánea o consecutiva ocupa una gran porción del trabajo de un intérprete: estos se mueven continuamente de un tema a otro, utilizan terminologías muy específicas, y solo una correcta preparación previa hace que todo esto sea posible.
Como clientes, para obtener un servicio de interpretación de calidad es importante tener en cuenta algunas cuestiones que ayudarán a la preparación del profesional:
Entregar documentos esenciales por adelantado
Para que un proyecto de interpretación salga bien, el cliente debe colaborar brindando al profesional todo el material y los documentos que crea necesarios para su previo estudio y análisis. Puede tratarse del orden del día de una reunión, presentaciones Powerpoint o discursos escritos. Por otro lado, también es recomendable compartir con el profesional cualquier nombre, título u organización que vaya a aparecer en el evento o reunión para que el interprete vaya familiarizándose con los mismos. A la hora de entregar documentos y material de estudio, el tiempo es crucial: cuanto mayor sea la anticipación, mejor se podrá preparar el intérprete y mejor saldrá el trabajo.
Notificar al intérprete de los cambios
Si surgen cambios significativos en los materiales entregados con anterioridad al profesional o modificaciones en los temarios de la conferencia o la reunión que se debe traducir, siempre se debe notificar al intérprete y, de ser necesario, volver a enviar los documentos corregidos o actualizados para una adecuada preparación.