En los ámbitos de la traducción o de la interpretación muchas veces se trabaja con materiales sensibles o se presencian reuniones cerradas en las que se tratan temas de índole privada. Existen, al igual que para otro tipo de profesiones, ciertas normas éticos que deben respetarse, entre los que se incluye la confidencialidad y la manera en la que se tratan los documentos o la información brindada por los clientes. Esto último tiene una gran importancia de cara a quienes contratan este tipo de servicios y en lo que provoca en la imagen y el profesionalismo de un traductor o interprete.

La confidencialidad en la interpretación

La confidencialidad es uno de los aspectos que fundamentan la ética profesional en el ámbito de la interpretación. La Asociación Internacional de Interpretes de Conferencias, también conocida como AIIC, cuenta con un Codigo Deontológico donde se recogendistintas pautas para un comportamiento profesional responsable y ético, y que incluye entre sus líneas lo que se conoce como el “deber de confidencialidad”.

En dicho Codigo Deontológico se obliga a los miembros de la Asociación a mantener el más estricto secreto profesional en relación a todas las personas y a toda la información que sea revelada en el transcurso de la práctica de la profesión en cualquier reunión, ya sea pública o privada. Por otro lado los miembros deben abstenerse también de obtener beneficios personales posteriores basados en la información confidencial adquirida en el ejercicio de sus obligaciones.

La confidencialidad en la traducción

En los trabajos de traducción, el valor de la confidencialidad cobra una especial importancia en términos de ética profesional y de la calidad del trabajo brindado. En este ámbito laboral se trabaja con una gran cantidad de documentos de distinta índole, como patentes, contratos, expedientes, certificados de nacimiento, entre otros. Existen algunas cuestiones básicas relacionadas a la confidencialidad en la traducción profesional que debemos tener en cuenta:

  • Todos los documentos son confidenciales hasta que se hagan públicos de manera oficial. Además de esta pauta general, los clientes pueden establecer otras pautas de confidencialidad especiales para el tratamiento específico de sus documentos.
  • No se deben divulgar datos confidenciales en ningún entorno, incluyendo dentro del ámbito del sector interno de la misma organización o agencia de traducción.
  • Los documentos que se ponen a disposición del profesional para su traducción deben almacenarse en un lugar seguro. Es fundamental que se tomen todas las precaucionesnecesarias y pertinentes para no terminar extraviando la documentación.