La Feria del Libro de Madrid 2018, consagrándose en su 77° edición, abrió sus puertas el 25 de mayo y recibió a más de dos millones de personas durante los 17 días completos en los que estuvo disponible al público. Si bien la venta de libros bajó aproximadamente un 7% en comparación con lo que se vendió durante la feria del año pasado, la cantidad de lectores y aficionados a la literatura que pasaron por allí se mantuvo en comparación con otras entregas siendo uno de los eventos de más éxito de la ciudad. Esta nueva entrega de la Feria del Libro ha sido un momento propicio para recordar la importancia de los traductores y correctores en el ámbito de la literatura, siendo esta la primera vez en la historia del evento en la que ASETRAD ha estado presente con su propia caseta.
La importancia de los traductores en la literatura
La Feria del Libro de Madrid ha cerrado sus puertas hace pocos días tras recibir a más de 2,2 millones de visitantes y un total de 8,2 millones de euros en venta, y deja al descubierto que la literatura todavía ocupa un lugar importante en la vida de las personas, consagrándose una vez más como uno de los eventos de mayor éxito del año. Entre los distintos participantes que se pudieron observar durante la 77° edición de la Feria del Libro de Madrid, ASETRAD (Asociación Española de Traductores, Correctores e Interpretes) disfrutó por primera vez de una caseta propia en el expositor n° 5 donde no solo respondió cuestiones referentes a su sector sino que además organizaron charlas especiales durante las jornadas del 28 y 29 de mayo.
Además de las exposiciones y de las charlas que se presentaron en el marco de la Feria del Libro de Madrid de 2018, ASETRAD también aprovechó la ocasión para recordar la importancia de los traductores y correctores dentro de la literatura con una campaña especialmente diseñada para la visibilización de estas dos figuras editoriales.
La campaña desarrollada por ASETRAD para visibilizar el trabajo de correctores y traductores en el marco editorial se bautizó bajo el lema #LosOtrosAutores, y además de recordar la importancia de estos profesionales en la literatura se hizo hincapié de que los traductores son “autores de su propia traducción”, por lo que se los debe considerar “los otros autores”. Si bien esto último que hemos citado pueda resultar tajante para muchos, lo cierto es que es la Ley de Propiedad Intelectual la que reconoce a los traductores de esa manera en su artículo 11, cuestión de la que se ha hecho eco ASETRAD en su campaña para legitimar aún más el trabajo de los profesionales del sector.