La traducción jurídica es aquella que se centra en la traducción de textos y documentosde índole legal de un idioma a otro. Estos documentos pueden ser tanto públicos (emitidos por un organismo público) o bien ser de carácter privado. Para obtener buenos resultados dentro de este sector en particular es fundamental que las traducciones las realicen profesionales especializados en el ámbito jurídico ya que, en virtud de la importancia de este tipo de documentos, un simple error puede traer consecuencias sumamente graves para el cliente.
La traducción jurídica de calidad
La traducción jurídica requiere de conocimientos específicos y de un grado de especialidad por parte del profesional para poder llevar adelante un proyecto de manera adecuada y con buenos resultados. Lo cierto es que muchas veces, visto el tipo de documentos que se manejan, el proceso puede llegar a ser algo diferente al que normalmente siguen los traductores. En algunas ocasiones se requiere de un trabajo completamente manual, debiendo traducir palabra por palabra respetando incluso las repeticiones o ciertos formatos que en otras circunstancias serían eliminadas para una mejor comprensión y coherencia del texto. Uno de los ejemplos más claros con respecto a esto es el tema de las mayúsculas: es frecuente encontraren los textos jurídicos ciertos términos en mayúsculas al medio de una oración, algo que no sucedería en un documento de otra índole, y deben respetarse sin excepción.
Los desafíos de la traducción jurídica
De las distintas especializaciones que se incluyen en la traducción profesional, la jurídica es una de las que requiere más cuidado y periciadebido a las consecuencias que se pueden generar a raíz de errores en los documentos. Por ello, los profesionales que se dedican a la traducción jurídica se enfrentan a ciertos desafíos que vale la pena conocer:
El lenguaje
La comunicación en lo que refiere al sector jurídico no acepta errores o malas interpretaciones. Los traductores que se enfrentan a documentos legales deben comprender el contexto completo del documento sobre el cual van a trabajar y transmitir el mensaje exacto que se obtiene del texto original sin dar lugar a malas interpretaciones, confusiones o cuestiones ambiguas.
Conocer los sistemas legales
Si bien en el mundo hay muchos países que tienen sistemas legales similares o prácticamente idénticos, no todas las naciones comparten las mismas reglas. El hecho de que existan distintos sistemas jurídicos en el mundo supone una importante carga para el traductor, que deberá conocer las particularidades de cada uno de ellos con la mayor profundidad posible para adaptar los contenidos y sobre todo darle contexto a los documentos.
Entre la literalidad y la coherencia
Como mencionamos anteriormente, las traducciones de asuntos legales muchas veces requieren respetar ciertas repeticiones o incluso incorporar mayúsculas a mitad de una oración en virtud de términos específicos u oraciones que así lo requieran. Lograr el equilibrio entre respetar las reglas jurídicas y conseguir un mensaje final coherente y con sentido es uno de los desafíos más grandes para el profesional que se dedica a traducciones legales.