Durante el 2017 España registró cifras de récord en cuanto a número de turistas que visitaron el país para disfrutar de todo lo que tiene que ofrecer: entre los 82 millones de visitantes, más de medio millón optó por conocer la zona de Cantabria y su preciosa ciudad capital, Santander. Como se imaginarán, considerando las enormes cifras de turistas que llegan por temporada, contar con una plataforma bien traducida para que los extranjeros puedan acceder a ella sin problemas es claramente una necesidad.
En virtud de esto último, hace pocas semanas se estrenó la nueva y flamante página web de turismo de Santander, anunciando además con orgullo que estaba disponible en 7 idiomas: la sorpresa ha sido mayúscula para todos, sobre todo para quienes ejercemos como traductores profesionales, al darnos cuenta de la enorme cantidad de errores garrafales que se encontraban en la misma y que evidenciaban el claro uso de traductores automáticos.
La web de turismo de Santander y el uso de Google Translator
El portal turístico de la ciudad de Santander generó un enorme revuelo en las últimas semanas entre los primeros visitantes al evidenciar una serie de errores que demostraban que claramente los encargados de desarrollarla habían prescindido por completo del trabajo de traductores profesionales en el momento de trasladar el contenido del sitio de un idioma a otro: en la plataforma se podían encontrar traducciones tales como “Loot Center” (centro del saqueo) para hacer referencia al Centro Botín, lo que con justa causa generó molestia y hasta indignación no solo por parte de los profesionales del área de la traducción y la interpretación, sino por parte del público en general.
Lo que preocupa en el caso del sitio de turismo de la ciudad de Santander no es solo la dificultad de comprensión e interpretación que genera para los visitantes extranjeros que deseen acceder a información valiosa sobre la localidad antes de viajar, sino también el hecho de que una plataforma que ha sido construida utilizando dinero público se haya realizado prescindiendo de la mano profesional de los traductores especializados para decantarse por una herramienta gratuita de traducción automática como lo es Google Translator, de dudosa procedencia y sin ningún tipo de fiabilidad en cuanto a los resultados. Ya hemos hablado en otra ocasión sobre la desventaja de hacer uso de estas herramientas virtuales por encima de los servicios de traductores profesionales, le invitamos a leerlo haciendo click aquí.